Verano en Menorca

Monday, June 29, 2009

Anxiety

Hay un punto en el que el deseo nos traiciona y se vuelve en contra, esto lo han dicho los hombres sabios desde tiempos remotos. Posiblemente en la época remota de los talayots y aún antes ya había gente tremendamente ansiosa, aspirantes a una realidad posible y al mismo tiempo imposible, quitándose años de vida de encima en un frenesí devorador del uno mismo, ajenos a la contemplación de la vida, obcecados en sus empeños posiblemente banales.
Había hombres que cazaban el viento, armados de walkie talkies, encocados, histéricos, gente a la que le faltaba el gran propósito que es la falta de propósito.
Me puedo hacer una idea de lo que debe ser la vida corriente de losgrandes empresarios y de los trabajadores autónomos con familia, especialmente de aquellos que trabajan en temporada, me viene a vuelapluma el gazpacho Alvalle, ese gazpacho empaquetado tan rico que, en los últimos tres o cuatro años, ha tenido tanto éxito, pero que ahora, como vale mucho más que todas las imitaciones, que tampoco están mal, ya no se vende. Me imagino a un hombre o a varios temiendo la llegada del día de su ruina, día seguro en el que habrían de ser vencidos por los que lo hacen más barato, y durante todo ese tiempo, esos caballeros han debido vivir en la obligación del mayor abastecimiento posible y de la mayor producción posible, por aprovechar el momento de su éxito. Naturalmente que a Alvalle le siguiron rapidito los de Don Simón, pero la verdad es que Don Simón no dio en el clavo, queriendo dar gato por liebre, después salió el del Esroski, pero también se equivocaron, y aún al doble de precio el pueblo prefería Alvalle, que se nota que lleva verdura de verdad y además pelada. Pero finalmente llegó el Día % con su gazpacho elaborado con aceite de oliva extravirgen y que te sale a 1 euro el litro, y entre el Alvalle a 3 con algo y el del Día la verdad es que no hay una diferencia tal que merezca dos euros con algo más de gasto, especialmente en estos tiempos que corren.
De modo que es evidente que Alvalle ha caído, y que el final de su agobio ha llegado. Espero que esas buenas gentes hayan logrado hacer suficiente dinero como para una buena jubilación, y que sus trabajadores, que debieron también de ser personas honradas, puedan encontrar trabajos de buena paga.
Imagino a esos responsables de todos esos trabajadores en los días calurosos del verano, sin aire acondicionado, caminando por carreteras de una sola dirección, queriendo alcanzar el horizonte. Un horizonte de retama y enebro, una ambición de un sudor como una resina que no se despega.
Haciendo cuentas que siempre van bien pero que no acabarán de ir bien del todo, cuentas que no nos van a salvar de nada, pues en cada suma parece que se desploma todo lo sumado como años que caen de golpe en nuestros frágiles cuerpecitos de bebes engrandecidos.

Poco tiempo para escribir, a lo cuál tan benéfico el aburrimiento y el atrevimiento del aburrimiento le resulta, pero seguiremos. Hasta el final.




Aparecieron el otro día en las playas, son del tamaño de un preservativo, y eso parecían, preservativos flotantes en la superficie del mar, pero es una medusa, conocida como Velella Velella, o medusa velera. Tiene ese cartílago que hace de vela, y la mueve el viento. Parece ser que no se sabe muy bien cómo se reproduce ni de dónde sale, pero de pronto el mar se llena de ellas y van a parar a las costas y a las playas, que es a donde el viento al final lo lleva todo.
Aparecisteis en el mundo de los hombres
Sin saber de sus sombras y sus dudas
Como un látex ciliado
Reticulado, transparente y evidente
Aguasvivas, mar encarnado, sol de planetas más azules, inocentes e iridiscentes
La playa temía al banco de medusas urticantes, las madres prohibían a sus niñas bañarse en el mar espinoso
Pero llegaba el lado gracioso de la naturaleza salvaje, el lado suave y cartilaginoso

La cala el mar abrazaba y el mar
suspiros de amor le enviaba
Florecillas de ausencia
Ortigilllas que eran hierbabuena

Por otra parte se anunciaba, casi simultaneamente, la presencia terrible de una armada enorme de caravelas portuguesas en aguas del estrecho, quizás encaminadas al mediterráneo.

Ya llegaban las huestes de Enrique el Navegante, para alejar del Mediterráneo a los extranjeros y atraerlos al Algarve.

Curiosamente, la Caravela portuguesa (Physalia Phisalis), tiene mucha relación con la medusita velera, y son de los pocos seres que se pasan la vida en la superficie del mar.
De modo que con lo grande que es hacia abajo, los hay que prefieren la mayor superficialidad

Friday, June 19, 2009

Un pedazo de tierra en medio del mar

Parece que este verano va a ser acalorado. 
En un momento en la calle, uno está sudando la gota gorda.  Cuánto más cuándo es por trabajar y por llegar a fin de mes.
Pero ese uno no cuenta con que entre todo este mar de soledad y desesperación, hay un pedazo de paraíso en donde todo va bien y el mayor calor es revitalizante. 

Es la isla de la felicidad, es Menorca, no Mallorca sino Menorca. Mucha gente a la que le dices que estás en Menorca luego te pregunta que qué tal por Mallorca, y eso debe ser porque Menorca está oculta a la conciencia por motivos evidentes.

Otro día seguiremos con las descripciones de esta gran comarca perdida

Sobre la ambición de los políticos




Parece que la ambición es el vicio de la edad madura, según decía en un manual de educación de señoritas que me enseñaba nacho el otro día. La ambición no somos nada. Cada vez queremos ser más grandes. Sin ambición estamos perdidos. Buda apuntó desde el primer momento maneras de Buda y estaba bastante claro desde el principio que iba para Buda y que quería ser Buda.

No sé cómo puede haber alguien realmente humilde, en realidad a esos que son humildes les llegan los de la ong con sus land rover de cien cilindros y ya se ponen a estudiar francés esa misma tarde.

Pero sin embargo la gente habla entre sí en general como si fueran poco ambiciosos de nada y como si no les interesara más que lo totalmente altruista. 

Como si todo el mundo no molestara y no ocupara lugar, cuando todos soñamos con la gloria de una manera u otra.

El caso más llamativo es el de los políticos, que se erigen en representantes de la gente que no es político. Critican a otro político acusándole de "maquiavelismo" .

Mientras mantienen la discusión de facciones cotidiana, nos gobiernan y hacen con nosotros lo que les da la gana. Nos sacan el dinero y nos dicen cómo tenemos que vivir y nos enseñan a distinguir entre el bien y el mal. No les vota nadie en las elecciones y les da exactamente lo mismo, porque como ellos dicen una y otra vez, ellos tienen el poder. Esta gente son engañadores, son los fabuladores de toda las mentiras, y su desmedida ambición de mando nos amarga la vida.

Obama, Zapatero, Rajoy, Rosa Díez, Francisco Franco, Adolf Hitler, Jose María Aznar y Perón y Fidel Castro, son todos el mismo cuento maquiavélico lamentable. Lo que nos enseña que lo más importante en la vida en sociedad es la astucia, la de saber qué quieren los otros sin que lleguen a pensar lo que quieres tú. Para así venderles cosas o incluso, por qué no, dominarles.